Por Karina Zavaleta Un hombre que se dedicaba al estudio de las estrellas recuerda los momentos terribles de su vida en un asilo de ancianos.EXT. JARDÍN DE UN ASILO. NOCHE Alexis, un anciano de 60 años, está sentado en una banca con los ojos cerrados. ALEXIS: Ya estamos en otoño, ¿verdad? ENFERMERO (en off): Sí…Déjame adivinar… ¿Ahora qué estrella quieres que busque? Por más que has intentado explicarme no veo absolutamente nada, además las luces de la ciudad no ayudan. ALEXIS (riendo): Es que no te esfuerzas lo suficiente. ENFERMERO (en off): Créeme que lo hago, pero no deja de sorprenderme la exactitud con la que describes el cielo, casi como si lo tuvieras frente a ti. En ese momento Alexis abre los ojos, blancos, nublados. ALEXIS: Algún día fue así, vi cosas que definitivamente me rebasaron. INT. PASILLO DEL INSTITUTO NACIONAL DE ASTROFÍSICA. DÍA Alexis de 40 años camina por un pasillo largo con la barbilla muy levantada, casi mirando el techo. INVESTIGADOR 1: Buenos días, doctor. Ya me enteré que lo nombraron jefe de departamento, estamos muy emocionados de trabajar con usted. Alexis fija su mirada en una mancha en el techo mientras escucha. ALEXIS (con una ligera sonrisa): Gracias Alexis continúa caminando sin cambiar la posición de su cabeza, el investigador lo ve alejarse con extrañeza. El director del Instituto se acerca al investigador. INVESTIGADOR: Qué raro es. DIRECTOR: Pues muy raro y lo que quieras, pero gracias él nos están aumentando el presupuesto este año. INT. RECÁMARA DE FABIÁN. DÍA Como ensoñación Fabián, un niño de 10 años, sentado en el suelo, llora mientras la mano de un anciano le acaricia la cabeza y baja por su cuello. ANCIANO: Ya, Fabián, no llores. ¿A poco no te gusta estar con tu abuelito? Fin de la ensoñación INT. RECÁMARA DE ALEXIS. MAÑANA Alexis despierta sobresaltado, se frota la cara, se levanta de la cama. INT. OFICINA. DÍA Alexis, sentado en su escritorio, está leyendo cuando de pronto entra un colega suyo. COLEGA (levantando ligeramente la voz): ¿Me puedes explicar, por favor, por qué registraste el proyecto anual sin mi consentimiento? ALEXIS (sin dejar de mirar lo que lee): Porque no lo necesito. COLEGA (enojado): ¿Sabes qué es lo peor? Que ni siquiera tengas el valor de mirarme INT. SALA DE JUNTAS. NOCHE Como recuerdo Diez personas sentadas alrededor de la mesa; Alexis mira su pluma, frente a él está sentado el mismo colega que le reclama sobre el proyecto anual. Ambos levantan la cabeza y sus ojos se cruzan, mantienen la mirada durante cinco segundos. Alexis cierra los ojos haciendo una mueca de asco, sacude la cabeza y la vuelve a agachar. De vuelta al presente El colega camina hacia Alexis y da un manotazo en el escritorio. ALEXIS (levantando ligeramente los ojos): Es que de verdad no quiero saber en qué terminó tu amorío con el perro, se veía que el pobre sufría bastante, al contrario de ti. Sólo espero que no sea el mismo perro con el que juegan tus hijos. El colega mira sorprendido a Alexis y quita la mano del escritorio. Confundido, sale de la oficina y azota la puerta. Alexis suspira aliviado. EXT. PATIO DE UNIDAD HABITACIONAL. DÍA Como ensoñación Alexis de 10 años mirando hacia una ventana del edificio ALEXIS (gritando): ¡Fabián! ¡Fabián! ¡Baja! ¡Me acaban de comprar un balón nuevo! Se abre la puerta del edificio y sale Fabián llorando. ALEXIS (preocupado): ¿Qué tienes? FABIÁN (llorando): Es que no me gusta cuando mi mamá se va a trabajar porque viene mi abuelito a cuidarme. Close up a los ojos de ambos. INT. RECÁMARA DE FABIÁN. DÍA Fabián sentado en el piso, desnudo y llorando, se abre la puerta y entra su abuelo. Fabián llora más fuerte. EXT. PATIO DE UNIDAD HABITACIONAL. DÍA Close up a los ojos de ambos. Alexis se sobresalta, se talla los ojos, Fabián sigue llorando. EXT. PATIO DE UNIDAD HABITACIONAL. DÍA El cuerpo de Fabián en un charco de sangre visto desde la azotea de su edificio. Fin de la ensoñación INT. RECÁMARA DE ALEXIS. MAÑANA Alexis de 40 años, en su cama, con los ojos cerrados, a punto de abrirlos. INT. SALA DE JUNTAS. DÍA Una imagen de la nebulosa El ojo de Dios DIRECTOR DEL INSTITUTO (en off): Esta es la imagen que el observatorio de La Silla en Chile captó el año pasado en colaboración con Alexis. Hasta ahora es la más nítida en el mundo. Cuatro personas en la sala. Alexis está recargado en el respaldo de su silla con la mirada en el techo. Todos lo miran, excepto el colega con el que tuvo la discusión sobre el perro. EXT. CALLE. NOCHE Alexis camina por la banqueta, llega a un puente peatonal en el que un hombre sube al barandal. Alexis se detiene, mira alrededor, hay cuatro personas cerca. Recuerda la imagen de Fabián en el charco de sangre, sube corriendo las escaleras, agarra al hombre justo antes de que salte. Forcejean, algunas personas se acercan. Alexis pone a salvo al suicida, la gente lo felicita. El suicida mira fijamente a Alexis, quien no puede evitar sostener su mirada. INT. DEPARTAMENTO. NOCHE Como ensoñación Un hombre degollado en la sala, aparece el hombre al que Alexis acaba de salvar, sosteniendo un cuchillo ensangrentado. En la mesita de centro hay una revista en cuya portada está el degollado, el encabezado dice: “La nueva promesa del teatro mexicano”. Junto a la revista hay dos retratos: en el primero, los hombres comparten el escenario; en el segundo se besan en un festejo de cumpleaños o en un aniversario. El hombre clava el cuchillo en el segundo retrato, después en la portada de la revista. Fin de la ensoñación EXT. CALLE. NOCHE Alexis aprieta los ojos en un gesto de desagrado, la gente lo felicita, el suicida lo mira llorando. Alexis se levanta y se va corriendo. INT. DEPARTAMENTO DE ALEXIS. NOCHE Alexis entra muy aturdido a la cocina, toma un picahielo. Gotea sangre en el piso y se escucha un grito. EXT. JARDÍN DEL ACILO. NOCHE El enfermero sentado junto a Alexis, lo mira fijamente con los ojos muy abiertos. ALEXIS Sólo así he podido vivir un poco tranquilo. ENFERMERO ¿Pero no extrañas estudiar el cielo? ALEXIS No, vi mucho, hasta de lo que jamás hubiera querido enterarme.
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May 2016
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